Crítica de Top Gun Maverick

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Top Gun Maverick (Kosinski, 2022) es una película que tenía muchas ganas de ver desde que se estrenó el primer tráiler, a pesar de que yo no formo parte de ese grupo de personas que vivieron el estreno de la primera película y, por lo tanto, no presento ningún vínculo nostálgico con la saga. Pero tras ver esas escenas de pilotaje tan realistas, no me podía resistir a verla. Además, el hecho de que Tom Cruise haya estado tan involucrado en el proyecto jugó un punto a favor, ya que este actor está pasando (en mi opinión) por el mejor momento de su carrera.

Como he dicho, debido a mi edad, yo no pude vivir el estreno de la primera película de Top Gun (Tony Scott, 1986). Y no sólo no la pude ver en su estreno, sino que no la vi hasta un día antes de ir a ver la segunda peli. Top Gun nunca fue una película que me llamara la atención, ni por su temática, ni visualmente, ni su música (soy muy fan de la música de los 80, pero en una peli me saca demasiado). Y, efectivamente, tras verla no me pareció para tanto. Creo que es una de esas películas que se valoran dentro del contexto en el que se estrenó, pero que se ha quedado demasiado anticuada para las nuevas generaciones. Como mis expectativas con Top Gun no eran muy elevadas, el hecho de verla no me desanimó a ir a ver Maverick. Y no me equivoqué con esta segunda película tampoco. Top Gun Maverick es una entretenidísima película de acción que, si bien toma las cosas de Top Gun que la hicieron un éxito, la eleva al siguiente nivel.

Argumento

El argumento de la película no tiene mucho misterio. De hecho, su estructura es casi clavada a El Sargento de Hierro (Eastwood, 1986). Se presenta al personaje principal, Maverick, y lo que mola; por demostrar lo que mola se mete en problemas en su destino actual y le terminan mandando a su anterior destino, Top Gun. Una vez allí le obligan a entrenar a un grupo de estudiantes graduados con honores que se creen los mejores y Tom Cruise les hace ver que no saben tanto como piensan. Tras el entrenamiento entran en una situación de combate real, la solventan con éxito y todos felices y amigos. No soy guionista ni experto en crítica de cine, pero creo que la historia de esta película esta muy bien contada y respeta los hechos narrados en la primera película. Las escenas de acción están muy compensadas y duran lo justo y necesario, no terminan aburriendo ni dando dolor de cabeza. Los personajes están bien escritos y definidos, aunque algunos sean bastante estereotípicos (algo que no considero necesariamente malo). En general, la historia la he disfrutado bastante, así que nada que objetar.

Actuaciones

Las actuaciones de los actores son todas muy convincentes aunque el que destaca por encima del resto, como era de esperar, es Tom Cruise. Aparte de ser un actor como la copa de un pino y de tener una personalidad desbordante, este papel le viene como anillo al dedo. Y el hecho de que haga las escenas de acción (¡y vaya escenas!) él mismo a su edad, tiene más mérito. Tom Cruise está viviendo una segunda juventud y está aprovechando muy bien todo el éxito y dinero conseguido a lo largo de su carrera en crear productos cinematográficos de primera calidad. Desde luego que se merece el éxito, tanto de crítica como de taquilla, que están cosechando sus últimas películas.

Tom Cruise en la moto
Tom Cuise feliz en la moto consciente de que Top Gun Macerick va a ser la pera.

Efectos especiales

Realmente no sé si tiene sentido analizar esta categoría en esta película, ya que diría que todas las escenas de vuelo son reales y realizadas por los propios actores (excepto, imagino, las piruetas más difíciles de llevar a cabo). Es posible que el entorno (montañas, colinas…) sí haya sido generado por ordenador, como se hizo en Mad Max: Fury Road (Miller, 2015), ya que no creo que los actores se jueguen el pellejo al pasar tan cerca de estos elementos. Si ese es el caso, evidentemente que los efectos especiales son de 10, ya que no me ha dado da sensación en ningún momento de ver objetos generados por ordenador.

Tom Cruise en el avión
Tom Cruise apunto de despegar hacia un nuevo éxito.

Banda sonora y efectos de sonido

La banda sonora sonora de la película está bien orquestrada de la mano del omnipresente Hans Zimmer. De hecho, en este apartado viene la gran mejoría respecto a la primera película. En mi opinión, la banda sonora excesivamente ochentera de Top Gun es el principal motivo de que le haya hecho envejecer no tan bien como otras películas. No pretendo insinuar que la música de los ochenta sea mala o haya envejecido mal, sino que en una película de este estilo no encaja demasiado bien. A pesar de que los temas más reconocibles de la película original están presentes en la nueva, estos no tienen ese sonido a sintetizador tan característico de los ochenta (y de Giorgio Moroder, en particular). En general, la nueva banda sonora hace que los momentos épicos resulten más épicos. Respecto a los efectos de sonido, más de lo mismo. Con la mejora en la tecnología han conseguido que los aviones suenen mejor que nunca, lo cual le pone una pequeña pega que comparte con prácticamente todas las películas de acción actuales: hay que verla en el cine. Esta película fue rodada para sacar el máximo potencial de las salas de cine, por lo que imagino que vista en el televisor de cincuenta pulgadas, y con los altavoces chusteros que incorpora, se perderá gran parte del espectáculo.

Conclusiones

Top Gun Maverick es, para mí, la mejor película en lo que llevamos de año y tiene los mejores combates de aviones que se puedan ver en el cine. Todo de la mano de un incombustible Tom Cruise al que hay que disfrutar viendo en pantalla, ya que se lo pasa pipa, y se nota.

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